La psicología del color se define como un estudio que investiga y analiza el efecto y el comportamiento al percibir un color. Según se pudo conocer hay emociones, sensaciones e inclusos significados relacionados con cada tonalidad.
De acuerdo a lo que afirman los expertos, los colores pueden influir directamente nuestro estado de ánimo. Entonces, partiendo del concepto y la premisa antes mencionada, es de vital importancia conocer lo máximo que puedas sobre la psicología del color en el hogar, ya que si seleccionas los colores acertados podrás sentirte mucho mejor en tu vivienda.
Una de las primeras cosas que tienes que hacer es planificar el esquema de color, pero ¿a qué se refiere esto? Simple y sencillo. Dentro de la teoría del color, el esquema de color se conoce como la variedad de los posibles colores usados en el diseño para distintos medios.
Por ejemplo, los colores brillantes (verde, azul, naranja o amarillo) influirán a que sientas una sensación expansiva, de amplitud. Son excelentes para el comedor o la cocina.
Ahora bien, los colores oscuros tendrán un efecto sombrío en la decoración de tu hogar; es por ello que se sugiere incorporarlos en pequeños detalles.
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Los colores cálidos te ayudarán a sentir una estancia confortable
Por otra parte, en lo que respecta a los colores cálidos (naranja, amarillo o marrón) te ayudarán a sentir una estancia con más calor y más confortable. Son perfectos para dormitorios.
Si eres de los que te gusta el rojo, este incrementa la energía de un espacio. Por tal motivo, se debe combinar con colores claros que lo equilibren.
Recuerda que los colores también favorecerán a que una estancia pueda parecer más grande o más pequeña, que te haga sentir más cómodo o más incómodo. Todo depende de la psicología del color.
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Consejos para emplear la psicología del color en tu hogar
A la hora de comprar una casa una de las primeras cosas que debes hacer es decorarla, usualmente un individuo suele hacerlo escogiendo los colores y los objetos que más le gustan, sin seguir patrón alguno.
A continuación te damos varios consejos claves para lograrlo:
Selecciona colores que te gusten y que te aporten sensaciones placenteras.
Si quieres que tu casa sea más cálida una buena idea es usar los colores que aporten calidez. Entre ellos figuran el rojo, el amarillo, el marrón o el amarillo. Combinarlos entre ellos también es una excelente opción.
Usa colores relajantes en las habitaciones de descanso como el dormitorio o el baño. El color azul, el verde, blanco o lavanda son colores maravillosos para establecer un efecto de calma y relajación.
Por último, si no sabes qué colores usar en tu hogar, déjate guiar por los colores de la naturaleza, de esta manera conseguirás una casa acogedora y cálida.
