Al emprender la búsqueda de la casa perfecta llegamos a ver tantas opciones que cuando al fin encontramos una que se acerca a lo que soñamos, no queremos dejarla ir. Al comprar vivienda muchas veces nos apresuramos a iniciar y concluir el trámite de compraventa y dejamos pasar algunos detalles.
Pero, ¿cuáles son los problemas más habituales que pueden surgir a la hora de comprar vivienda?
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Incumplimiento de contrato
Uno de los primeros problemas que pueden surgir al comprar vivienda es el incumplimiento de contrato por parte del vendedor o promotor. Esto suele ocurrir cuando el vendedor no cumple con una o algunas de las condiciones que se expresan en el contrato o documento firmado con relación a la venta de la propiedad.
Pero también pueda producirse que dicho documento no cumpla con las obligaciones establecidas por la Ley. O en su defecto, que la vivienda no cuente con las condiciones mínimas de habitabilidad.
El precio
Otro punto que es relevante mencionar es el precio, el cual se cataloga en muchas oportunidades como un tema espinoso. Al momento de adquirir un inmueble, el aprieto más común se da cuando se llega a un acuerdo de precio y días después una de las partes lo cuestiona.
El precio bajo de venta de una propiedad está relacionado con la presencia de ciertos desperfectos. Por ello, la solución consiste en pedir una tasación de la propiedad, así nadie podrá objetar su precio porque es el real. Recuerda que como el comprador de la propiedad y ya firmaste el contrato, no puedes volver atrás a causa del precio pues enfrentarás a problemas legales.
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Trámites apresurados
El tercer problema puede ser que el proceso de cierre al comprar vivienda se de en muy poco tiempo. Una vez que te notifican que resultó aprobada la transacción sólo te dan dos semanas para que se concrete la compra con el dinero necesario, lo cual es muy poco si es que el efectivo proviene de un crédito hipotecario. El remedio o solución para esto es tener la mayor cantidad de trámites adelantados.
Defectos constructivos de la vivienda
Suele ser el más común y el que causa mayores dolores de cabeza. Por lo general, luego de comprar vivienda, comienzan a hacerse evidente los vicios ocultos o los desperfectos.
Algunas grietas, humedad, acabados inconclusos, filtraciones, azulejos que se desprenden, fallas en el sistema eléctrico suelen ser solo algunos de los defectos constructivos más usuales. Estos, es la mayoría de los casos, aparecen si se trata de una inmueble de segunda mano, si son descubiertos una vez se habita la vivienda.
Poca visión a largo plazo
El último, pero no menos importante, de los problemas que suelen surgir al comprar es quizá no contar con una visión a largo plazo de lo que se quiere. Muchos inversores se aventuran a sin pensar que dentro de unos años pueden necesitar otro tipo de casa, bien sea por cambio de trabajo o por aumento del número de personas de la familia.
Es importante aprender a diferenciar cada uno de los problemas; ya que los primeros tienen solución casi inmediata, mientras otros implicarán una inyección de dinero adicional. En lo que respecta a las características de la propiedad, muchas de éstas no dan lugar a modificación, como por ejemplo, la orientación o ubicación del inmueble.
Lo cierto es que la solución a estos problemas es contar con un gestor o bróker especializado que nos oriente a la adquisición de la vivienda adecuada.
Actualizada el 24/10/2021